Ilustración: poster diseñado por @_nadineghannoum y @kindaghannoum.jpg y publicado en acceso libre por @flyers_for_falastin (prohibida su reproducción comercial)
Pensar en, con Palestina: nacionalismos, imperialismos y resistencia anticolonial
Ya son nueve meses en que, armado de la última tecnología militar y del apoyo político y financiero de las grandes potencias del “mundo libre”, Israel desata una guerra de destrucción genocida contra una población reducida a la hambruna y asediada en la cárcel al aire libre más grande del mundo, hoy convertida en un verdadero campo de exterminio.
Así como ayer el nombre de Auschwitz, hoy el nombre de Gaza desafía la comprensión de nuestro tiempo, no sólo en tanto emblema de la violencia destructora de la que el colonialismo todavía es capaz, sino como el lugar donde se expresan desnudas las tendencias que se agitan en el fondo de nuestro época. Pensar lo que ocurre hoy en Palestina resulta por ello una tarea urgente para desentrañar la manera en que nuestro presente converge en la otrora “tierra santa,” bajo el signo de una Nakba (una catástrofe) que no deja de repetirse.
Lejos del relato de un “choque de civilizaciones”, que quiere convencernos de que el genocidio en curso no es más que un nuevo episodio de la lucha entre dos pueblos separados por la religión y condenados a odiarse eternamente, los últimos meses han revelado, a quien todavía le cabía alguna duda, la verdadera cara del proyecto sionista, y han puesto en evidencia las alianzas profundas que lo vinculan al dominio del capitalismo occidental. Basta ver la manera en que el movimiento de solidaridad con Palestina es reprimido acá, en Nueva York, Berlín o París. Hoy resulta claro que Israel no sólo es el último de los grandes colonialismos de poblamiento, sino también el puesto de avanzada de la nueva reacción global: el lugar donde, bajo la protección del imperialismo occidental, el supremacismo blanco se reinventa, se ensayan las nuevas estrategias de control, zonificación y exterminio de las poblaciones, y se ponen a prueba las tecnologías de vigilancia y represión que se exportarán luego a lo largo y ancho del mundo.
De igual forma , hoy Palestina no es sólo un símbolo de la lucha de los pueblos por su emancipación, sino la primera línea de la resistencia contra el imperialismo a nivel global: el lugar donde convergen y vuelven a llenarse de sentido las causas del anticolonialismo, el antirracismo y el internacionalismo.
Los textos que acá reunimos tratan de nombrar, discutir y pensar el presente en Palestina, y con Palestina nuestro presente común, denunciando el genocidio en curso y abogando por el derecho a la resistencia y a la autodeterminación de los pueblos oprimidos.
El especial Pensar en, con Palestina constituye una invitación abierta a seguir pensando, en proximidad y solidaridad con la experiencia palestina, la terrible actualidad de los imperialismos y nacionalismos, en sus líneas de muerte y destrucción, así como también la necesidad de seguir oponiéndoles, hoy con más fuerza que nunca, nuestros ánimos de resistencia y nuestros deseos de vida y liberación colectivas.